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China celebra una CIIE distinta, con presencia de empresas argentinas

Este artículo fue originalmente publicado en el diario El Economista, disponible en este enlace.

Por Patricio Giusto (*)

Con un discurso grabado del presidente Xi Jinping, se inauguró la III Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés) y el Foro Económico Internacional de Hongqiao, a desarrollarse entre el 5 y 10 de este mes. El evento comercial más importante para China se da este año en circunstancias muy particulares. Debido a la pandemia del Covid-19 y a los estrictos controles adoptados por China al ingreso de extranjeros (hisopado más cuarentena obligatoria), la CIIE tuvo que adoptar un inédito formato semipresencial, con la mayor parte de las empresas extranjeras participando de manera virtual.

Cabe recordar que las dos ediciones anteriores fueron un éxito en materia de participantes y transacciones realizadas, con cifras absolutamente récord. La CIIE 2019 cerró con negocios por más de US$ 70.000 millones y casi un millón de asistentes provenientes de 181 países, además de presencia de organismos internacionales como la OMC, el PNUD y el Centro de Comercio Internacional. En dicha edición, más de 3.800 empresas extranjeras exhibieron sus productos, tecnologías o servicios. Las autoridades de la CIIE anticiparon que, pese a la pandemia, esta tercera edición aspira a superar los números de 2019. Incluso, aunque resulte curioso, este año hay más superficie física destinada para los stands en el impresionante complejo de Hongqiao, el cual fue remodelado y ampliado para esta ocasión.

Respecto a la participación de Argentina, mucho se ha especulado al respecto en los meses previos. Se suponía la CIIE iba a ser la ocasión para el primer viaje presidencial de Alberto Fernández a China. Finalmente, esto fue descartado hace unas semanas y ni siquiera viajarán el canciller Felipe Solá u otros funcionarios. Los 14 días de cuarentena requeridos sin excepción al ingresar a China, sumado al desastre sanitario y económico que atraviesa actualmente Argentina, echaron por tierra la posibilidad de planificar el viaje presidencial. La visita oficial de Fernández a China se realizaría en febrero o marzo del año que viene.

No obstante estas vicisitudes, Argentina tendrá una activa participación en la CIIE, con un pabellón de honor que estará a cargo de nuestra representación diplomática en la potencia asiática. Asimismo, pese a las dificultades para viajar, habrá 20 empresas argentinas exhibiendo de manera presencial, mientras que otras 14 lo harán de manera virtual. Cabe resaltar que todas las empresas argentinas participantes pertenecen al rubro agroindustrial, justamente el de mayor presencia y potencial de crecimiento en materia de ventas a China, país que ya se ha afianzado como el principal socio comercial de Argentina.

LAS RELACIONES SINO-ARGENTINAS

Desde que asumió en su cargo, el presidente Fernández ha buscado estrechar los lazos con China, tanto por afinidades como por necesidades. China ha replicado esta buena predisposición con numerosos gestos, como ser el fuerte apoyo en materia de asistencia sanitaria en el marco de la pandemia, el aval a las negociaciones con los bonistas privados y el FMI, junto con la promesa de nuevas inversiones y la renovación del swap de monedas.

Sin embargo, todo indica que Fernández mantiene expectativas sobredimensionadas respecto a China, país que hoy atraviesa un proceso de reformulación de sus prioridades económicas, en un contexto internacional inéditamente adverso. En ese sentido, ha trascendido que China no estaría dispuesta a que Argentina haga una gran conversión de yuanes a dólares, en momentos que busca apuntalar su moneda a nivel internacional. En paralelo, se sigue demorando el cuestionado -y aún desconocido- acuerdo porcino.

Por otra parte, China mantendría en stand by proyectos de inversiones en infraestructura, como ser el tren a Vaca Muerta, hasta tanto la situación económica de la Argentina sea más estable. El fantasma de Venezuela, donde China tiene hundidos unos US$ 70.000 millones, está muy presente en Beijing. Además, en el marco de la creciente disputa con EE.UU. y la ola mundial de sinofobia a raíz de la pandemia, China será más cuidadosa que nunca de su imagen internacional y de realizar movimientos que irriten gratuitamente a Washington.

(*) Director del Observatorio Sino-Argentino, docente del Posgrado sobre China Contemporánea de la UCA y profesor visitante de la Universidad de Zhejiang (China).